Kyuzo se niega a abrir la boca. Sander guardo silencio y le observo fijamente barajando las opciones que tiene a mano mientras ignora lo que el resto le dice. Al final, el mercenario se encoge de hombros.
"Bien, sera por las malas...Afirmenlo y tapenle la boca, que no meta ruido ni se mueva mucho"
Ordena mientras se arregla los lentes. Una vez las chicas hicieron caso, sander tomo uno de los dedos del rubio y lo tiro hacia atras quebrandoselo con toda la calma del mundo. Sin cambiar de expresion, continuo quebrandole los dedos uno a uno con tortuosa lentitud. Una vez termino con los de la derecha, prosiguio con los de la izquierda.
"Tu dime cuando te sientas con ganas de hablar...Quien sabe, quizas y hasta te deje vivo, aunque, claro, sin un ojo dudo puedas hacer mucho"
Solto esas palabras como si nada. No mostraba remordimiento o duda, ¿y como hacerlo?; practicamente creciendo en un ambiente donde el fuerte sobrevive, mostrar debilidad era algo que no podia permitirse. Quitando eso, sander es consciente de que mucho tiempo no tiene, por lo que, en caso de que Kyuzo de verdad no este dispuesto a soltar informacion, simplemente lo dejaria inconsciente y lo usaria como rehen. Adentro de la base debe de haber alguna persona que sea mas facil de usar.